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Truchos y adivinos. Alicia Kirchner mandó a vallar la casa de gobierno y las obras empezaron antes que se adjudique la licitación

Truchos y adivinos. Alicia Kirchner mandó a vallar la casa de gobierno y las obras empezaron antes que se adjudique la licitación – Foto: OPI Santa Cruz/Francisco Muñoz

13:30 – En el informe que vamos a desarrollar a continuación hay al menos tres componentes importantes: el primero es la decisión de la gobernadora de vallar la casa de gobierno, previendo que el 2018 va a ser un año aún más difícil que el pasado, con reclamos y conflictos sociales y/o sindicales de todo tipo y pretende, claro está, que el palacio de gobierno no sea blanco de las protestas, con ocupación de sus jardines o ingreso de jubilados o trabajadores que luego permanecen por días dentro de sus pasillos.

La “obra” se enmascaró tras un título urbano y estético y en la comunicación oficial del gobierno alude a la “Puesta en valor paseo exterior casa de gobierno en Río Gallegos”, obra que administra el IDUV y se lleva a cabo con financiación del Fondo Federal Solidario Dec Mac 205/03.

El segundo es la increíble manera en que se instrumenta la obra. La forma en que se planifica y ejecuta, demuestra, una vez más, el desprecio del gobierno por la cuestión administrativa y la transparencia de los actos de gobierno y la facilidad que tiene para inventar necesidades aparentes, con tal de generar obra pública que implique movimiento de fondos, las cuales, claro está, se encuentra sobrefacturadas o ampliadas a valores que nada tienen que ver con la realidad.

Aquí nos vamos a detener para que el lector comprenda lo que señalamos y dónde está la burda maniobra, detrás de la cual hay decenas de millones de pesos que van a parar vaya a saber a qué bolsillo.

Como dijimos el gobierno sacó a licitación esta obra llamada “Puesta en valor paseo exterior casa de gobierno en Río Gallegos” con un presupuesto oficial de $ 8.400.000,00 un plazo de 4 meses, donde se plantea una “capacidad de contratación” de $ 14.000.000,00, con un valor del pliego de $ 8.500, los cuales estarán a disposición de las empresas interesadas a partir del 26 de enero de 2018 (es decir dentro de siete días) en las oficinas del IDUV.

Hasta aquí no habría mayores problemas, excepto, claro, tendríamos que hilar fino sobre el costo de la obra, pero tampoco se brinda un detalle de la misma, en la comunicación oficial del gobierno.

El punto que demuestra la burda maniobra de simulación administrativa que lleva adelante el gobierno de la provincia, es que mientras en casa de gobierno los obreros ya se encuentran abocados a la tarea de demoler lo que estaba y construir lo que han dado a llamar “el paseo exterior de la casa de gobierno”, hay un pequeño detalle insalvable que, en el apuro por hacer obras que son amores, el titular del IDUV, Pablo Grasso, descuidó: en la comunicación oficial del día 2 de enero 2018, dice que los pliegos se venden a partir del 26 de enero del 2018 y que la apertura de sobres será el 6 de febrero de 2018 a las 11:00hs en las oficinas del Instituto de la Vivienda.

Solo un adivinador, podría saber un mes antes, qué empresa va a ganar la licitación, porque en estos momentos y desde hace varios días, se está trabajando frenéticamente en el frente de la casa de gobierno, colocando toda una mampara de chapa en el perímetro, sobre la vereda, mientras adentro los obreros accionan con rotomartillos, rompiendo el paredón y alineando los anclajes donde se va a colocar el nuevo vallado.

Por lo tanto, aquí caben dos posibilidades: o la gobernadora Alicia Kirchner tiene dotes de adivinación, es mentalista, puede adelantarse al futuro y prever que tal o cual empresa será la ganadora lo cual le permite iniciar las obras un mes antes de saber quien se adjudicará los trabajos, o es toda una parodia, una truchada administrativa más, una mentira absurda y descarada de este gobierno, como otras tantas que lleva adelante sin importarle lo que diga la sociedad, ante la impunidad que existe en una provincia donde no hay fiscales, no funcionan los organismos de control y donde el gobierno nacional envía fondos a mansalva sin exigir mínimamente, que se respete la formalidad administrativa, el objeto de inversión, no controla los valores de las obras ni siquiera se preocupa por controlar los procesos licitatorios, habida cuenta que Santa Cruz es la cuna de la cartelización de la obra pública, hecho que, con las pruebas a la vista, sigue viva y goza de buena salud.

El tercer punto a destacar en esta iniciativa de construir todo lo posible es el viejo ardid del kirchnerismo, hoy potenciado demagógicamente desde el IDUV por su titular Pablo Grasso, quien sueña con picar en punta en el 2009 y con los fondos públicos nacionales, hace campaña tapando pozos de las calles, asfaltando calles en barrios, coronando la “gran Magario” anteponiendo el cartel “IDUV – Presidencia Pablo Grasso” y ocupando un lugar que la inútil gestión del actual intendente de la ciudad, Roberto Giubetich (Cambiemos) no completa.

De esta manera, el FPV arremete desde el gobierno provincial, con la idea de la ventaja que podrá sacar en las urnas el 2019, si plantea de manera demagógica esta campaña mezquina y barata en calidad, pero muy cara financieramente para los que tributan con sus impuestos.

El gobierno provincial se ve impulsado a construir cualquier cosa que se presente, no olvidemos el principio básico que los mueve “detrás de una necesidad, siempre hay un gran negocio”. En esa búsqueda, hasta la gobernadora, quien nunca fue a Caleta Olivia, apareció abrazándose con el intendente Facundo Prades (Cambiemos) con el fin de construir un albergue. Los problemas sanitarios y la emergencia hídrica, siguen sin solución y el orden de prioridades parece no afectar las decisiones gubernamentales.

Un fiel representante del FPV en esta provincia, Carlos Sancho, tras la destitución de Acevedo en el 2006 y cuando se hizo cargo de la provincia de manera interina, ante el apremio de Néstor Kirchner por recuperar el tiempo perdido en la facturación con las licitaciones truchas, se vio en la necesidad de apurar los trabajos sin cumplir en los mínimos detalles el aspecto administrativo. En ese marco y tratando de justificarlo ante la opinión pública, en uno de sus discursos fundó la inolvidable frase “lo que importa son las obras, los papeles después vemos…”, mientras con la lapicera firmaba y autorizada el robo magistral de la obra pública en Santa Cruz, que nosotros advertíamos pero que nadie se animaba a publicar.

Hoy pasa exactamente lo mismo. El gobierno inició una obra 15 días antes que comience a vender los pliegos de la licitación y más de un mes antes de la apertura de sobres para saber quién ganó. Está claro que los papeles “no importan”.

Traducido al idioma popular: el gobierno truchó los papeles, ya tiene la obra adjudicada (algunos indican que sería la empresa Gallo Construcciones) y sin perder tiempo, han comenzado a trabajar. Por lo tanto, todo lo que se haga de acá en más, en el aspecto administrativo, es nulo. La venta de pliegos será trucha y al apertura de sobres el día 6 de febrero también. Pero nadie va a investigar esto en la provincia. (Agencia OPI Santa Cruz)

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