08:40 – La Sala I de Casación tomó el trámite tras el fallo de la Corte
La Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal asumió ayer la causa en la que el ex presidente Carlos Saúl Menem fue condenado a siete años de prisión por la venta ilegal de armamento a Croacia y Ecuador para comenzar a revisar esa sentencia. A 22 años de la denuncia, la causa parece haber iniciado su camino final.
La semana pasada fue sorteada la Sala IV de Casación, integrada por los jueces Juan Carlos Gemignani, Gustavo Hornos y Mariano Borinsky, pero ninguno de los tres podía intervenir en el expediente. Borinsky fue el fiscal del juicio oral donde fue absuelto el ex presidente, mientras que Hornos también debía excusarse porque su hermano fue el juez en lo Penal Económico que intervino en el expediente, y Gemignani revisó el fallo que confirmó la pena a siete años de prisión. Entonces, por una acordada interna, Hornos mandó el expediente a Eduardo Rafael Riggi, presidente de la Sala I de la Cámara, quien junto a Liliana Catucci quedó en condiciones de revisar el fallo condenatorio.
La semana pasada, la Corte Suprema, por unanimidad, impulsó una rápida revisión de la causa. Los jueces Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco, Juan Carlos Maqueda, Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz instaron a Casación a dictar un nuevo fallo “en el menor término posible, incluso con el acortamiento de sus propios plazos”, porque los recurso llevaban más de seis años de trámite.
Impugnación
Precisamente, la condena por el contrabando de armas fue lo que sirvió a un partido de izquierda de La Rioja para impugnar la precandidatura de Menem para renovar por tercer período consecutivo su banca en la Cámara alta.
Pero la sentencia no está firme: en 2011 un tribunal oral que llevó adelante el juicio lo absolvió y luego una sala de Casación revocó ese fallo en 2013 y lo encontró culpable. Pero no fijó el monto de la pena, por lo que volvió al tribunal oral (de 2013), que le impuso siete años; cuatro años después, en julio último, Casación confirmó el monto de la pena. Pero no revisó la condena. Como las normas exigen un doble conforme, la Corte, antes de decidir, la envió a Casación para que revea el caso.
Como presidente, Menem firmó entre 1991 y 1994 tres decretos secretos para venderles armas a Panamá y Venezuela. Pero esos países eran una pantalla porque el destino final de 6500 toneladas de armamento fueron Croacia y Ecuador, sobre quienes regía una prohibición de venta de pertrechos bélicos. La ONU había decretado un embargo sobre ambos países, que estaban en guerra. (La Nación)
