09:10 Cuando faltan unos pocos días para que el directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) finalmente se pronuncie sobre el renovado programa stand-by alcanzado con el país, el Gobierno puso sobre la mesa resultados de las cuentas públicas que respaldan el plan ideado para terminar con las turbulencias cambiarias de los últimos meses y comenzar a bajar la inflación .
Por: Francisco Jueguen
El déficit fiscal primario de los primeros nueve meses se redujo 47% en términos reales, mientras que el gasto es el menor para ese período desde 2012, según el oficialismo. En los últimos quince meses, los recursos del sector primario no financiero -excluyendo ingresos extraordinarios como el blanqueo en 2016-2017 o los aportes del Banco Nación este año- crecieron por encima de los gastos, según informó el Palacio de Hacienda. Esto sucede por primera vez desde 2003.
La meta fiscal de este año, que era de 3,2% del PBI antes de la renegociación con el FMI, es ahora del 2,7%. En el Gobierno creen que la alcanzarán cómodamente, según indicó el ministro de Hacienda y coordinador del equipo económico, Nicolás Dujovne , en conferencia de prensa. Lo acompañaban en el microcine del quinto piso el secretario de Hacienda, Rodrigo Pena, y el flamante secretario de Política Económica, Miguel Braun . La meta para el año que viene (que era un rojo de 2,2%) es ahora el equilibrio fiscal. En tanto, para 2020 debe haber un superávit de 1% con relación al PBI.
“En términos del producto, el déficit primario alcanzó 1,1% del PBI en los primeros nueve meses. Este resultado, sumado a la ejecución del Programa de Inversiones Prioritarias, arroja un valor de 1,3% del PBI, lo cual es 0,6% del PBI inferior a la meta establecida para el período enero-septiembre de 1,9% del PBI”, estimaron en Hacienda.
En septiembre, los ingresos totales subieron al 36,6%, mientras que los gastos aumentaron al 26,5%. El déficit se redujo 27,1% interanual, lo que implica una contracción de 48% en términos reales. “Los intereses crecieron fuertemente en septiembre debido principalmente al impacto del alza en el tipo de cambio”, reconocieron en el Gobierno. El alza fue de 66,5%.
Entre enero y septiembre, los ingresos totales aumentaron un 28,1%, mientras que los gastos subieron al 20,3%. En ese sentido, según recalcaron en el Ministerio de Hacienda, el déficit primario cayó 31,1%, 47% en términos reales y un punto en términos del PBI.
En lo que va del año, el rojo financiero mostró un alza de 3,5% por una suba de un 55% de los intereses de la deuda. Para Hacienda, se redujo 19,8% interanual en términos reales y 0,7 puntos porcentuales en términos del producto.
Los mayores recortes del gasto se dieron, entre enero y septiembre, en las obras (gastos de capital) relacionadas con transporte, vivienda y agua y alcantarillado, que tuvieron bajas nominales. También se redujeron fuertemente las transferencias a las provincias para gastos relacionados con pensiones con el Fonid y cajas jubilatorias provinciales, entre otras. La mayoría de los gastos, incluidos salarios, jubilaciones, pensiones, asignaciones universales, subsdios, aumentaron, pero algunos puntos por debajo de la inflación acumulada en ese período. Se trata de una caída real en esos gastos.
“El gasto corriente primario en los primeros nueve meses mostró el menor nivel en términos reales desde 2013 aun cuando el gasto en prestaciones sociales se ubica en niveles récord. Esto se explica por la reducción en el gasto en subsidios y el resto del gasto corriente, que volvió al nivel de 2007, y los gastos de operación, que están al nivel de 2010”, dijeron en Hacienda, y agregaron: “El gasto total del sector público nacional no financiero cayó en septiembre 7,4% en términos reales y 1% del PBI en los primeros nueve meses del año”. Según dijeron en Hacienda, las prestaciones sociales ya representan $58 de cada $100 del gasto primario. Con relación a 2015 aumentaron en 12 puntos su participación.
“La baja del gasto que se realizó en la Argentina en estos años del presidente Macri es inédita”, ratificó Dujovne. “¿Se sienten satisfechos con la baja del gasto sabiendo que el equilibrio fiscal del año se hace en gran parte con suba de impuestos, que llevará a 2019 a tener una presión impositiva récord’?, había preguntado LA NACION. “Hay que tener en cuenta que el gasto total era de 42 puntos del PBI en 2015 y empezó a bajar desde 2017”, afirmó Dujovne, dejando de lado el período en el que Alfonso Prat-Gay estuvo a cargo del Ministerio de Hacienda.
“Teníamos un cronograma por el que íbamos bajando el gasto, pero cambió debido a las circunstancias y tuvimos que acelerar la baja del déficit. Fue una decisión difícil porque tuvimos que poner un impuesto transitorio a las exportaciones hasta diciembre de 2020, que nos permite garantizar la estabilidad financiera de los argentinos. Es un impuesto distorsivo que vamos a tener que eliminar”, afirmó. (La Nación)
