La AFIP anunció que el mes pasado se recaudaron $559.092 millones, lo que representa una aumento nominal de 24% con relación al año pasado, pero por debajo de la inflación de 42% aproximada para el mismo periodo. Esto implica una caída de 13,1% en términos reales, según cálculos del Iaraf. Los ingresos del fisco siguen golpeados por los efectos de la cuarentena y el impacto de la menor actividad económica, aunque tuvieron una mejora en comparación a los meses previos.
“La caída en el nivel de actividad y las distintas medidas de política tributaria tendientes a aliviar la situación de los contribuyentes constituyen los principales factores explicativos para la variación en los ingresos tributarios de julio. La dinámica de la recaudación evidencia, sin embargo, una desaceleración en el ritmo de contracción en términos reales con relación a los registros observados desde que inició la pandemia del Covid-19”, explicaron en la AFIP.
En el Iaraf, por su parte, destacaron que “la caída del mes de julio equivale a un faltante de $85.000 millones en la recaudación tributaria mensual, necesarios para mantenerla constante respecto a julio de 2019”.
“A la hora de explicar la caída real de la recaudación se destacan las caídas de Ganancias, IVA Neto, Aportes y Contribuciones y Derechos de exportación, por la magnitud de sus caídas y su participación en la recaudación total. Siendo las caídas en tales impuestos de 24%, 23%, 21% y 17%, respectivamente. Los recursos destinados a provincias computaron una variación real interanual negativa de -13,1%, y los destinados a Nación de -13,2%”, agregaron en el Iaraf.
De hecho, por IVA -el tributo vinculado al consumo- se recaudaron $144.185 millones, con un incremento de apenas 10% interanual. Del total, $94.276 millones provienen del IVA impositivo (creció 3,2%), y $52.959 millones, del IVA aduanero (con un alza de 20,9%). En este concepto la información que se divulga es la del mes anterior, es decir, la de junio, en el cual hubo una inflación interanual de 42,8%.
Por el impuesto de seguridad social -vinculado al mercado laboral y al nivel de ingresos salariales- se recaudó $147.564 millones, con un alza de 18,5%. De este total, $60.955 millones son aportes personales y $84.602 millones fueron contribuciones patronales.
En el caso de los ingresos por derecho de exportación, la recaudación fue de $33.034 millones y creció 12,6% en la comparación interanual, aun con el incremento del tipo de cambio y las mayores retenciones. Los derechos de importación, en tanto, crecieron 4,5% y significaron un ingreso de $15.613 millones.
La recaudación del impuesto a las ganancias alcanzó los $107.619 millones, con un aumento de 8,7%. Con estos ingresos obtenidos en el último mes, la recaudación acumulada en el año se acercó a los $741.384 millones, lo que representa un crecimiento de 16% frente 2019.
El impuesto a los débitos y créditos (más conocido como el impuesto al cheque) exhibió un alza del 26,6%, y generó ingresos por $37.020 millones. En el año, se recaudaron $238.683 millones, con un alza de 32,3%.
Por el impuesto PAIS, que grava con el 30% la compra de dólares, el fisco recaudó $20.018 millones, casi el doble que el mes previo. Por Bienes Personales, hubo un incremento de 338,4% en la recaudación e ingresaron al fisco $9240 millones.
“Un elemento relevante a la hora de evaluar el desempeño de la recaudación es el elevado nivel de acogimiento a los distintos Planes de Facilidades de Pago por deuda corriente. Este comportamiento, que se traduce en una merma en los ingresos tributarios, no sólo se explica por la dimensión de la crisis sino también por las distintas modificaciones normativas y la ampliación de las herramientas disponibles para regularizar obligaciones vencidas. Dichas medidas implementadas por la AFIP representan un esfuerzo en términos de administración tributaria que facilitan la regularización de deudas”, concluyeron en la administración que preside Mercedes Marcó del Pont. (La Nación)
