Si bien es cierto que en el complejo Represas (Cóndor Cliff-La Barrancosa) el desborde de contagios y casos positivos generó la decisión de cerrar provisoriamente y suspender los trabajos en los dos obradores, hasta ayer martes que comenzaron nuevamente a ser convocados, información suministrada a OPI por proveedores, indica claramente que la medida también responde a cuestiones financieras muy serias, generadas a partir de la crisis económica nacional y la falta de los aportes nacionales comprometidos para la continuidad del complejo hidroeléctrico.
En Cóndor Cliff, la UTE le había cursado a las empresas el pedido para arrancar con los servicios el viernes 9 de octubre, pero luego la medida fue suspendida por la empresa, sin que hasta el momento hayan trascendido los motivos de la contramarcha. Sobre la Barrancosa, inicialmente no se tomó ninguna medida al respecto. Las últimas informaciones dan cuenta que ayer martes comenzaron los trabajos y el arribo continuo de colectivos con personal. Dan cuenta que hisoparon una 40 personas en Buenos Aires y luego los trajeron para represas sin esperar el resultado de los análisis.
Cuando venían llegando a Caleta Olivia, indican nuestras fuentes, les avisaron que una de las médicas dio positivo. Posteriormente todo ese personal anduvo en la obra en espacios comunes y después del mediodía de ayer, fueron aislados. “Sigue habiendo Protocolo cero en las Represas y hablando con los médicos nos dicen que hay alrededor de tres o cuatro veces más de infectados de lo que se ha informado”.
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El otro problema
La UTE Represas Patagonia tiene serios problemas financieros y esto se manifiesta en las abultadas deudas que posee con los proveedores de servicios. De acuerdo a nuestras fuentes hay proveedores con los cuales arrastran deudas por 8 millones de dólares. Uno solo de ellos tiene por cobrar algo más de 1 millón de dólares y hay empresas de servicios a las cuales les deben desde el mes de enero y febrero de este año. Esto ha deteriorado la cadena de pago, ya que las empresas ven resentida su disponibilidad para reinvertir, pagar sueldos y reparar maquinarias u obtener insumos. “Tenemos que aguantar y vamos tapando agujeros, porque en esta situación siembre hay alguien que se quiere quedar con tu trabajo y la UTE si no podés cumplir te cambia por el primero que aparece”, dijo nuestra fuente y remató “La pandemia les vino bien a estos sinvergüenzas (NdR: la UTE) que presionan para que todos cumplan, pero ellos parecen estar al margen de lo que le ocurre a la gente acá adentro”.
También se nos señaló que el problema del deslave del cerro en Cóndor Cliff nunca fue resuelto ni se han dispuestos fondos para la reparación del terreno. Inicialmente se calculó un monto de 250 millones de dólares para apuntalar la falla, pero las discusiones posteriores con los chinos, no habrían tenido el éxito que se presumía y esta grave falla en la obra, la cual OPI informara en forma exclusiva con la foto donde claramente se observa el fenómeno de la grieta en el cerro, impide que Cóndor Cliff siga adelante con el proyecto planificado de la represa más cercana a la localidad de El Calafate. (Agencia OPI Santa Cruz)