Según publica La Nación Sergio Berni negocia con una compañía acusada de incumplimientos; Mendoza se encamina a otorgarle un contrato a una firma acusada de lavar dólares de los Kirchner.
Por: Hugo Alconada Mon
El gobierno de Buenos Aires es kirchnerista; el de Mendoza, radical. Pero tienen un rasgo en común. A la hora de comprar chalecos antibalas, ambos lidian con empresarios cuestionados por sus negocios e investigados por la Justicia. Pero aún así les entregarán contratos multimillonarios, según surge de expedientes administrativos que cotejó LA NACION.
Junto a la Cordillera, el gobierno de Rodolfo Suárez se encamina a otorgarle un contrato por más de $188 millones a Armoring Systems, la empresa con la que, según la Justicia federal, Gustavo Sergio Dorf lavó millones de dólares del entonces secretario privado de los Kirchner, Daniel Muñoz.
Desde mediados de año, el Ministerio de Seguridad mendocino cuenta con los dictámenes y vistos buenos para comprarle 3300 chalecos antibalas a Dorf, a pesar de que su empresa quedó bajo la mira en el “caso cuadernos” y fue embargada por $400 millones. No sólo eso. La Justicia lo citó a una nueva indagatoria tras detectar más activos bajo sospecha.
El juez federal Julián Ercolini citó a Dorf a declarar cuando concluya la feria judicial de enero junto a otros miembros del círculo íntimo de Muñoz; entre ellos, Víctor Manzanares, el contador que compartía con los Kirchner.
Junto al gobernador defendieron el proceso licitatorio. “Estamos al tanto de quién es el empresario, pero otra cosa es la empresa, que no registra conflictos y que, por tanto, no puede ser bloqueada. Sus chalecos ya superaron la evaluación técnica de la Policía y el Servicio Penitenciario mendocinos, que son los que los usarán, y ahora atraviesa el período de homologación por la Anmac [Agencia Nacional de Materiales Controlados]”, indicó un vocero de Suárez.
Pero las vinculaciones -y negocios- de Dorf no solo se extendían entre los kirchneristas. También se ufanó de sus supuestos lazos con Daniel “el Tano” Angelici, el empresario y binguero señalado como uno de los operadores dilectos del expresidente Mauricio Macri.
Consultado por LA NACION en 2019, cuando por primera vez se lo vinculó a Dorf, Angelici precisó que su esposa y la exmujer de Dorf eran íntimas amigas y comadres, pero adujo que el vínculo entre ellos era distante. “Nunca tuve una relación de amistad con él ni hago lobby por él ante nadie”, afirmó. “Lo veo muy de vez en cuando y sí le he enviado mi camioneta para que la blinde. Pero si está invocando mi nombre, no es el único”, remarcó.
Pero si Dorf calla y Angelici lo niega, sus rivales en el mundo de los chalecos los pegotean. Entre ellos, uno de los mayores rivales del primero en el mundo de los chalecos antibala, Fernando Andújar. Los acusa a ambos y al entonces ministro de Seguridad bonaerense, Christian Ritondo, de haberle tendido una trampa.
“Me recontra fundieron mal y me hicieron varias jugadas sucias. Ritondo, Angelici y Dorf. Y quedé en la lona. Póngalo porque lo declaré ante la Justicia”, dijo Andújar de viaje por Arabia Saudita a LA NACION.
La otra licitación
Tras el cambio de gestión bonaerense, sin embargo, Dorf, pareció perder influencia. Y Andújar recuperó terreno. El 29 de diciembre, el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, le compró chalecos antibalas a su nueva empresa, Tecnología Antibalas SA, por $1047 millones, a pesar de la denuncia penal que arrastra Andújar y la impugnación de una firma rival.
Andújar acumula traspiés, reiterados incumplimientos contractuales con dos empresas –América Blindajes y Next Glass- y turbulencias públicas en sus negocios con el Estado. Entre ellas, cuando se detectó que los chalecos de nivel superior de protección RB3 que proveyó con etiquetas de producción del año 2017 ocultaban, debajo, otras etiquetas que detallaban que eran del nivel inferior RB2, con fecha de producción 2008. Hoy la empresa con la que hizo eso está en quiebra y él afronta una causa penal por lo ocurrido.
“Fue la equivocación más grande de mi vida”, le dijo a LA NACION. “Accedí a un pedido urgente del Ministerio de Seguridad bonaerense cuando debí decirles que me esperaran quince días más. Pisé el palito y Ritondo aprovechó para meterme una denuncia penal que todavía está dando vueltas. Pero estoy esperando que me citen a declarar para prenderlos fuego a todos”, prometió.
Ritondo rechazó las acusaciones de Andújar. “Nosotros siempre compramos por licitación y Andújar siempre hizo lo mismo. Entregó una primera tanda de chalecos, luego entró en una rueda de reclamos y terminó no entregando los chalecos comprometidos”, dijo el exministro a LA NACION.
Minutos después, Ritondo envió detalles complementarios. Next Glass, de Andújar, debió entregar 20.000 chalecos masculinos y 5000 femeninos, pero incumplió en 2000 femeninos. Y en otra licitación, debió entregar 30.000 y sólo entregó 8000. “En cuanto a Armoring Systems [de Dorf], le compramos por licitación 11.000 unidades y los entregó”, abundó.
A pesar de esa denuncia penal, sin embargo, Andújar venció a fines de 2021 en tres “renglones” de una licitación y el ministro Berni refrendó comprarle 12.200 chalecos antibalas, con un anticipo financiero del 50% y con la opción de comprarle otros 12.200 más, por otros $1047 millones.
“Toda la licitación pasó por los organismos de control del Estado, que dieron su visto bueno, por lo que no podemos objetar a esta empresa”, indicó un vocero del Ministerio de Seguridad bonaerense a LA NACION en alusión a la nueva firma de Andújar. “Berni hubiera preferido que ganara Fabricaciones Militares para que el Estado le comprara a una empresa estatal, pero cuando tuvo que mejorar su oferta, no se presentó”, detalló.
En esa línea, el otro gran ganador de la licitación fue el empresario Fernando Barbeito, quien tiene como alfil en su empresa Delta V a Mauro Sestúa, ex mano derecha de Berni en el Ministerio de Seguridad nacional. Entregarán 20.000 chalecos a cambio de $1589 millones, también con un anticipo del 50% y la opción de comprarle otros 20.000 chalecos.
“Sí, Berni fue jefe y es amigo de Sestúa. No lo oculta, ni lo niega. Pero la empresa en la que ahora trabaja Sestúa [por Delta V] ganó en una licitación pública, no es que Berni le haya comprado directamente. ¿Qué va a hacer?”, plantearon desde el Ministerio a LA NACION.
Al menos uno de los competidores, sin embargo, sí impugnó la licitación. La firma Cuppari presentó escritos ante Berni, el gobernador Kicillof y el Tribunal de Cuentas bonaerense. Entre otros puntos, planteó que lo sacaron de la puja por una deuda de $48.000 en la patente de una camioneta cuando su oferta era $37 millones más baja para las arcas públicas. No obtuvo respuestas a sus objeciones.
Consultados por LA NACION, desde Delta V defendieron el proceso. “La licitación fue limpia. A nosotros también nos bajaron de un ‘renglón’. Y Cuppari estaba mal de papeles”, plantearon, además de negar que se hayan cartelizado con Andújar.
Las versiones de cartelización comenzaron a circular hace meses y se agudizaron desde el momento en que Delta V pasó a auspiciar al hijo de Andújar en la carrera París Dakar. “Sí, lo auspician, pero eso no significa nada”, retrucó Andújar. “Si la licitación no registró sobreprecios y los chalecos que compró la Provincia son buenos, ¿cuál es el problema?”.
Dorf deberá presentarse a indagatoria por lavado de activos provenientes de la corrupción, el 9 de febrero en los tribunales federales de Comodoro Py. Su archienemigo, Andújar, arrastra problemas de salud, bancarios, tributarios y penales. Pero ambos triunfan en los negocios con el sector público en Mendoza y Buenos Aires. (La Nación)
