El informe de la OPC indica que no hubo transferencias devengadas a la energía desde el Ejecutivo durante el primer mes del año, ni tampoco fondos destinados a las productoras de gas en el marco del Plan Gas.
Los subsidios energéticos consumieron US$9.683 millones del Tesoro en 2023, representando un 1,5% del PBI y experimentando un retroceso interanual del 22%. Este declive se atribuye a la reducción de los precios internacionales de los productos energéticos, mejores condiciones hídricas y segmentación tarifaria.
A pesar de la devaluación que elevó el dólar a $800, el gobierno de Javier Milei busca continuar reduciendo la financiación estatal al sector energético. Sin embargo, se espera que el impacto de esta medida se sienta a partir de marzo, dado que las transferencias se realizan con un plazo de 60 días.
Se espera que el nuevo sistema para segmentar los subsidios, propuesto por la Secretaría de Energía, se implemente pronto. Este sistema establecerá una canasta básica energética con volúmenes indispensables de consumo de gas y electricidad por zona bioclimática, permitiendo un mayor control sobre los subsidios. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA